sábado, febrero 07, 2009

Un Consenso Crucial para la Cumbre: el Reto Global 80-20

Por José Antonio Vanderhorst Silverio, Ph.D.
Consultor Sistémico
Arquitecto del Sistema EWPC
Semilla Orgánica del GMH
7 de febrero, 2009

Los miembros de la Mesa de Trabajo sobre Energía (Electricidad, Hidrocarburos y Energía Renovable) no están trabajando juntos para colaborar en la creación de un mundo sostenible, como sugiere Peter Senge en su nuevo libro “The Necessary Revolution” (La Revolución Necesaria). Senge fue nombrado como uno de 24 personas que han “tenido la mayor influencia en estrategia de negocios en el último siglo,” por el Journal of Business Strategy.

Todo lo contrario, están atrincherado y por eso tienen una estrategia para defender el orden establecido. Están trabajando resignados como isleños, sin darse cuenta de la verdadera realidad de un orden global emergente. Según Senge, “negocios, dominados por mucho tiempo en las industrias minera y de minerales, abogan ahora por las inversiones en energías renovables, como el viento y la solar.”

La Mesa de Trabajo de Energía está concentrada en arreglos rápidos, como los que se hicieron en las sillas del Titanic que en definitiva se hundió. Al tratar los temas por partes, el gobierno, parece estar tratando de reducir la presión que enfrenta a lo amplio de la sociedad dominicana con toda una serie de arreglos rápidos, en vez de concentrar la atención en unas pocas soluciones fundamentales, como lo es la del sector eléctrico con miras participar de manera activa en el orden global emergente. Senge afirma que “si vemos cada problema – sea falta de agua, cambio climático o la pobreza – como separados, y tratamos cada uno de forma separada, las soluciones a las que llegaremos serán de corto plazo, a menudo oportunistas, “arreglos rápidos,” que no enfrentan los desbalances profundos” sociales y ambientales.

Senge introduce el caso de la urgencia del orden global emergente con el reto 80-20: reducir las emisiones de carbono en 80 por ciento en 20 años. Se trata en pocas palabras del fin de la Era Industrial, que se ha convertido en una burbuja que está al punto de explotar. Senge explica que “lograr esto requerirá un mar de cambios en la clase de energía que usamos, los carros que manejamos, los edificios en que vivimos y trabajamos, las ciudades que diseñamos, y las formas en que la gente y los bienes se mueven alrededor del mundo, así como otros cambios que nadie puede siquiera adivinar.”

Un consenso nacional para enfrentar el reto 80-20 debería ser muy fácil de lograr si estamos dispuestos a cambiar nuestra forma de pensar. La transición hacia el 80-20 debe restarle rápidamente competitividad a las exportaciones de muchos países que han venido contaminando el planeta, haciendo que negocios locales sean relativamente más competitivos. Al mismo tiempo, la reducción en la acidez de los mares hará que nuestros corales dejen de ser destruidos y la incidencia de enfermedades respiratorias deje de repercutir como lo hace en el bolsillo de los pobres.

Ayer no participé en la Mesa de Trabajo, porque regresaba de una importante reunión de consulta entre interesados sobre los servicios de energía que tuvo lugar en Trinidad, a la que me invitó la Maquinaria Regional de Negociaciones del Caribe (CNRM por sus siglas en inglés). En ella presenté la EWPC como una estrategia ofensiva de comercio exterior, que sería presentada ante la Organización Mundial del Comercio (OMC), para integrar y liberar el gran mercado de servicios energéticos del CARIFORUM. Orientada al orden emergente, la estrategia no solo se concentra en asegurar los derechos de propiedad de los inversionistas, sino también y con igual intensidad asegurar en la OMC los derechos de propiedad de los consumidores que también podrán participar como productores. A mi regreso compré el nuevo libro de Senge y lo empecé a leer.

Por todo lo anterior, el libro de Senge debería ser de estudio y aplicación obligatoria para los directivos de las Mesas de Trabajo de la Cumbre. Al respecto, para contribuir en la creación de un mundo sostenible, sugiero suspender los trabajos hasta tanto dichos directivos dominen las enseñanzas del libro.