sábado, agosto 09, 2014

La lección de la Chikun Negra

La Chikun Negra es una síntesis de la combinación del virus de la Chikungunya y  “El Cisne Negro: el impacto de lo altamente improbable,” un libro de Nassim Nicholas Taleb, del 2007, que se hizo muy popular a raíz de la crisis económica global. Al igual que esa crisis sistémica, la Chikun Negra nos da la lección de que vivimos en un mundo altamente interdependiente en el que lamentablemente no pudimos interrumpir a tiempo dicho virus que nos ha debilitado grandemente. Esa lección la podemos usar a favor para implantar Cisnes Negros positivos, como se explica en el artículo Negaciones estrategia y desarrollo para fortalecer el país.

Argumento que no pudimos interrumpir la Chikun Negra por la forma Cartesiana de pensar que emplean las autoridades públicas y privadas ante problemas perversos o sistémicos. Ese es el caso, por ejemplo, del sector eléctrico dominicano, que ha venido contagiando las finanzas públicas con montos superiores a mil millones de dólares anuales en los últimos años. En ese sentido, la nota Caminemos con capital productivo de largo plazo es un complemento reciente a la interdependencia que tenemos con Haití.

De acuerdo a la noticia Registran 23,730 casos más de chikungunya, "… de 508,122 casos de chikungunya en Las Américas que registra la Organización Panamericana de la Salud (OPS) 370,141 corresponden a República Dominicana."  Al reconocer que nuestra respuesta a la Chikun Negra  fue altamente diferente a otros países, nos permite comprender porque somos muy diferentes a los demás en la crisis sistémica del sector eléctrico.

Esas autoridades acuden al consenso, como es el caso de la Estrategia Nacional de Desarrollo, para desestimar sugerencias, como la que aparece en el artículo Desconectemos el presupuesto del sector eléctrico, de mayo del 2011, el cual está diseñado para interrumpir dicho costoso contagio. Es así como podemos atribuir el excesivo contagio de la Chikun Negra a la población a la carencia de recursos en el sector salud durante muchos años, para explicar la fragilidad con que podemos asociar dicha carencia.

En efecto, se trata de una situación en que la causa y el efecto están muy alejados en el tiempo (desde aquel momento en que el sector eléctrico contagió negativamente el presupuesto del sector salud) y el espacio (sector salud y sector eléctrico). Es en esas situaciones en que el Estado necesita asegurar que emplea el pensamiento sistémico.

La mencionada sugerencia de diseñar Cisnes Negros positivos, que sugerimos implantar en toda su extensión, empieza diciendo que "Aunque nadie tiene una idea sobre que nos deparará el futuro en términos específicos en los años 2013 y subsiguientes, los dominicanos venimos jugando con candela y a la vuelta de la esquina puede aparecer otro gigantesco Cisne Negro negativo como el del déficit fiscal. Argumento que necesitamos derogar la Ley de la Estrategia Nacional de Desarrollo 1-12 para reducir grandes excesos del sector público y empezar a impulsar Cisnes Negros positivos con iniciativa privada."

Dejando de lado los últimos 6 párrafos de dicha nota, la misma continua diciendo: "A seguidas verán como la Teoría del Cisne Negro encaja dentro de la Columna Semanal “Liderazgo Sistémico” para propiciar Cisnes Negros positivos. De acuerdo a Wikipedia: la Teoría del Cisne Negro o Teoría de los Eventos del Cisne Negro es una metáfora que encierra el concepto de que un evento es una sorpresa (para el observador) y tiene un gran impacto. Después del hecho, el evento es racionalizado por retrospección. La teoría fue desarrollada por Nassim Nicholas Taleb para explicar:

• El desproporcionado papel de alto impacto, difícil de predecir, y los eventos extraños que están fuera del ámbito de las expectativas normales de la historia, la ciencia, las finanzas y la tecnología.

• La no computabilidad de la probabilidad de los eventos raros consecuenciales utilizando métodos científicos (debido a la naturaleza misma de las probabilidades pequeñas).

• Los sesgos psicológicos que hacen a las personas individual y colectivamente ciegas a la incertidumbre e inconscientes al rol masivo del evento extraño en los asuntos históricos.