Eamonn Kelly, en su libro "Powerful Times: Rising to the Challenge of our Uncertain World," se pregunta: ¿Debemos nosotros, como Petrucci (ver Sr. Zapete: ¿Debería Leonel Administrar lo que Queremos?), adoptar una estrategia reactiva de tomar las cosas como vienen, adaptándonos en el camino, arreglando las cosas día a día? A lo cual el mismo responde, "Estoy convencido que no debemos. Las apuestas son muy elevadas; nuestra era es demasiado compleja; y su velocidad es demasiado rápida para simplemente reaccionar. En vez de eso, debemos amplificar el poder de nuestros cerebros, individual y colectivamente, para ajustarnos a nuestras circunstancias."
Es evidente que hace falta de liderazgo en grandes cantidades. El problema más grande es el de desaprender. Es evidente también que carecemos de una visión sistémica compartida que deje de lado la "creciente disonancia entre el mundo dinámico e incierto que hemos creado para nosotros mismos y nuestras preferidas posiciones instintivas hacia ese mundo," tal como dice Eamonn Kelly en el prefacio de su libro.
Los sistemas sociales esenciales de RD, como la educación y los servicios de agua y electricidad, necesitan una gran reestructuración para transformarse en estos tiempos poderosos. A este momento hay 5 comentarios colocados a esa opinión. El que colocamos a nombre del GMH dice lo siguiente:
Estoy de acuerdo, excepto en que simultaneidad no significa cerrar las brechas para todos al mismo tiempo. Lo que se necesita es un real liderazgo para reestructurar el sector educativo para pasar del modelo industrial (escuelas que son fábricas) que asociaba a la gente con máquinas a un modelo digital emergente que potencie el desarrollo humano. Cerrar la brecha educacional se facilita con una solución sistémica que cierre la brecha digital reforzándose mutuamente vía un proceso a largo plazo.
Necesitamos realizar un Dialogue que nos ayude a organizar el país. El país que tenemos ha sido una obra construida por nosotros mismos, por acción o inacción. Dejemos de reaccionar y seamos proactivos para ponernos de acuerdo sobre cómo debemos transformar el país para el bien de todos, reduciendo las brechas esenciales simultáneamente. Liberemos a nuestra gente para que amplíen el poder de sus cerebros y coloquémoslos por mérito en las posiciones de mayor apalancamiento. Esa es la estrategia proactiva para cerrar las brechas esenciales.
© 2006. José Antonio Vanderhorst Silverio, PhD
Consultor Interdependiente en Electricidad
Propulsor del Grupo Millennium Hispaniola
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