Replantearse Nueva Metodología

José R. Yunén ha opinado en el Listín Diario del 19 de marzo lo siguiente:

Me asocio a quienes con luminoso júbilo, utilizan el reclamo de sus derechos sobre el deficiente suministro de la energía eléctrica. Que viene atacando sin tregua a los dominicanos, deteriorándoles la economía y su estado de salud. Las frecuentes y prolongadas interrupciones en el servicio energético generan en la población una tremenda ansiedad, por considerarlos como terrenos muy fértiles para abrir las puertas al flagelo peligroso de la criminalidad.

Nuestro Presidente, en su reciente discurso ante la Asamblea Nacional, dijo que la estrategia más adecuada para alcanzar un nivel financiero más sustentable del sector eléctrico, es descansar en la agresiva política de incrementar los ingresos mediante un aumento de los bajos niveles de las cobranzas, para solventar el alto costo de la generación.

Es un hecho cierto que el problema energético irrumpe en nuestro mundo cotidiano de varias maneras, inicialmente en el impacto económico por el alto precio de los combustibles, el calentamiento global generado por el consumo humano de energía a pesar de las continuas advertencias, y las incesantes controversias políticas alrededor del manejo de los recursos energéticos.

En términos reales, es cierto el aumento de los volúmenes de importación del crudo durante este período, pero, el aumento de la factura de los hidrocarburos tiene más que ver con los precios del petróleo, que se reflejan especialmente por los requerimientos y la consecuencia de China y la India que cada vez necesitan más volúmenes de recursos energéticos para sostener su auge como potencias económicas. Como resultado de las insuficientes promesas incumplidas y no visualizarse una solución inmediata a la crisis energética, el país se ha llenado de pequeñas, medianas y grandes plantas de energía eléctrica, que han aumentado una alta demanda en el consumo de los carburantes en un país que no produce petróleo.

En suma, un abismo, en frase bíblica atrae otro abismo. De manera que no quisiéramos volver a escuchar a los gobiernos de turno decirnos en frases repetitivas, que la reforma del sector eléctrico viene distorsionada por indiferencia de las administraciones pasadas. El gobierno actual debe replantearse una nueva metodología para mejorar el costo y deficitario servicio energético, así como ha iniciado el gran proyecto del Metro.

El GMH ha propuesto la Electricidad SCP como un nuevo planteamiento metodológico. Hay una creciente "sincronicidad" en los reclamos para resolver el flagelo del sector eléctrico dominicano. Como dijera Victor Hugo, "No existe en el mundo nada más poderoso que una idea a la que le ha llegado su tiempo."