Ensayo original 2008 (c) de José Antonio Vanderhorst-Silverio, Ph.D.
El ahora obsoleto modelo de negocios de la empresa eléctrica verticalmente integrada, de ganar casos de tarifas al regulador funcionó hasta los años 70, porque los costes de electricidad de los clientes se reducían año tras año, pues el combustible era barato y los costes de las transacciones de los clientes al por menor eran prohibidos. Dado que los clientes podrían ser clasificados en segmentos de mercado bien definidos, para evitar altos costos de transacción, el regulador se convirtió en un intermediario autonombrado para comprar electricidad al por mayor. Ese paradigma de la Segunda Revolución industrial ya no funciona.
En la tercera Revolución Industrial que estamos viviendo hoy, la situación antedicha se ha invertido: los costes energéticos están prohibitivos y los costes de las transacciones de los clientes al por menor se reducen año tras año. El regulador como intermediario ahora produce gastos indirectos innecesarios, pues la opinión de los clientes en el valor de la electricidad varía extensamente. Ambos cambios están permitiendo un nuevo paradigma que permita la liberalización de los mercados de la electricidad, así que los clientes tengan libertad de elección, precios justos y eficientes, mientras que el sistema eléctrico se planea, se gestiona y se controla con eficacia con la respuesta de los clientes habilitada por la tecnología.
El paradigma de la electricidad sin control de precios (EWPC) implica dos mercados que se refuerzan mutuamente: 1) un mercado controlado del transporte, cuyo acuerdo se basa en la responsabilidad de transportar, y 2) un mercado (al por menor y al por mayor) robusto, completo, abierto, y completamente funcional, donde la responsabilidad de servir sea conforme a acuerdos que deben habilitar el bienestar social máximo, bajo regulaciones prudenciales similares a las de la industria financiera.
En la tercera Revolución industrial, el viejo modelo de negocios de ganarles caso de tarifas al regulador depende enteramente de riesgos elevados de parte del regulador; las apuestas a los proyectos de las empresas eléctricas entrarán las estructuras de tarifas. "Sin embargo, bajo el paradigma de la arquitectura y del diseño del mercado de la brecha EWPC, " … los gastos indirectos de ambas empresas eléctricas y del regulador se eliminan, " y los minoristas (una nueva casta de segunda generación) compiten a su propio riesgo (ni del cliente, ni del contribuyente de impuestos) en varios segmentos de mercado mundiales en que intentan desarrollar modelos de negocio innovadores, como se hace en muchas otras industrias.
Para permitir la revolución verde de la tecnología, según lo previsto por “el famoso del capital de riesgo,” Juan Doerr, es muy importante dar una fuerte mirada al paradigma que abre la brecha de la arquitectura y del diseño del mercado en www.energyblogs.com/ewpc
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