Aunque espero estar muy equivocado,
todo luce indicar que el Presidente Danilo Medina se sentirá obligado a hacer
más de lo mismo cuando divulgue a la nación las decisiones relacionadas con el
Pacto Eléctrico restringido por la Estrategia Nacional de Desarrollo. Entiendo
que lo hará amparado en esquemas
de cooperación no sistémicos en sentido norte-sur y sur-sur. Tratando de incidir en dicho pacto con un enfoque
sistémico, son muchos los artículos que aparecen en la Columna Semanal “Liderazgo Sistémico.”
Reiterando la nota El presidente Medina dio más detalles de la cuenta
en su política eléctrica, los tres malestares principales que él enfrenta con
esos esquemas históricos norte-sur
y sur-sur fueron descritos por Nassim
Nicolas Taleb en su libro The Black Swan (Penguin Books, 2008):
1.
la
ilusión de entender, o como cada uno piensa que sabe lo que está pasando en un
mundo que es más complicado (o aleatorio) que lo que se da cuenta;
2.
la
distorsión retrospectiva, o como solo podemos evaluar los asuntos después que
pasan, como si estuvieran en un espejo retrovisor (la historia parece más clara
y más organizada en los libros de historia que en la realidad empírica); y
3.
la
sobrevaluación de la información real y la desventaja de la gente autoritaria y
educada, particularmente cuando crean categorías…
En esta ocasión, con base al
Proyecto energía de la Red Interamericana de Academias de Ciencias (IANAS), el
artículo 06-13 Proyecto energía IANAS agrega
a los anteriores un esquema de
cooperación sistémica en sentido sur- norte, que pretende abrir la industria eléctrica
a la innovación para hacer lo que nunca se ha hecho en colaboración con dicha
red. Ojala que no suceda como con la capitalización y el Acuerdo de Madrid que se
combinaron para cerrar el sector a la innovación por cerca de 15 años.
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